Ore quiso darle un lugar a su propia creación e inventó un lugar para ella llamado Io (io), el cual se encontraba en su propia imaginación. a "Ella" no le molestaba esta mujer y le dio un nombre: Alqua. Esta imagen mental era todo lo que una heroína debía tener, o por lo menos lo que "Ella" creía según los miles de libros que leía.
Ore y Alqua siempre estaban juntas en sueños, Ore vivía sus ilusiones a través de Alqua y Alqua dejaba salir algunos pensamientos u opiniones a través de Ore
Ore y Alqua siempre estaban juntas en sueños, Ore vivía sus ilusiones a través de Alqua y Alqua dejaba salir algunos pensamientos u opiniones a través de Ore
Un día la mujer decidió que siendo Alqua un estrato de su propia mente, era en sí ella misma y se autodenominó Ore llo Alqua, que significa Corazón de cisne, en una lengua élfica de Tolkien, para así sellar esa unión.
- ¿Soy la primera que creas? - Preguntó Alqua
- No lo recuerdo - Dijo la voz de la mujer
- ¿Soy la primera que creas? - Preguntó Alqua
- No lo recuerdo - Dijo la voz de la mujer
- ¿Te agrada lo que has creado?
- Si - Contestó nuevamente la voz - A través de ti puedo permitirme huir del mundo real. Me gusta mucho venir a Io cuando duermo... y cuando estoy despierta también. Recuerdo que cuando era más pequeña siempre iba un lugar imaginario a ser todo lo que yo quería en ese entonces, pero nunca tuvo un nombre, ni me tuvo a mi, o sea a ti. Soy feliz cuando vengo aquí
- Si - Contestó nuevamente la voz - A través de ti puedo permitirme huir del mundo real. Me gusta mucho venir a Io cuando duermo... y cuando estoy despierta también. Recuerdo que cuando era más pequeña siempre iba un lugar imaginario a ser todo lo que yo quería en ese entonces, pero nunca tuvo un nombre, ni me tuvo a mi, o sea a ti. Soy feliz cuando vengo aquí
Alqua sonrió.
Pasaron largos años donde nadie las interrumpió, pero Ore en el mundo real se estaba transformando en una mujer muy solitaria y melancólica...
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